SECOT y su excelencia
Miguel de Unamuno recibió la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio de manos de Alfonso XIII. En el momento de recibir la condecoración le dijo al monarca: “Es un honor que me agasaje con este Premio que tanto me merezco”.
El rey sorprendido le contestó: “Hombre, ¿cómo dice usted eso?” A lo que Unamuno respondió: “Es que sólo digo la verdad”.
-“Sí, pero otros galardonados manifiestan, pese a sus méritos, que no merecen la distinción”.
-“Esos, majestad también dicen la verdad”.
Y traigo a colación esta anécdota, que refleja la ironía, la inteligencia y hasta la desfachatez de Unamuno, porque estoy seguro de que si él estuviera dando este discurso hablaría de los premios que los galardonados que los van a recibir tanto merecen. Según la RAE la palabra “premio” es la recompensa o galardón que se da por algún mérito o servicio. Un premio supone un reconocimiento al esfuerzo, a la labor bien hecha, a los logros alcanzados en el desarrollo de una tarea.
Un premio representa también un agradecimiento de quien lo otorga al galardonado, porque los motivos de su merecimiento contribuyen también al buen nombre del concesionario.
Con los premios al mérito reconocemos los logros de las personas o instituciones. Con los premios al servicio valoramos su entrega a la consecución de un bien común, cuyo destino es la sociedad en la que viven.
Como institución sin ánimo de lucro y de carácter altruista los premios que concede SECOT con la ayuda inestimable de la Fundación Repsol a cuyo vicepresidente Ignacio Egea quiero saludar con cariño y agradecer su patrocinio, son premios al Servicio prestado por los Seniors y las Delegaciones donde trabajan por su labor de Asesoría y por los proyectos sociales que impulsan.
SECOT es una institución que enseña a emprender. Que ella misma es emprendedora. Que practica el emprendimiento. Pero al mismo tiempo es una institución que cultiva el desprendimiento porque no busca ningún beneficio.
Y son premios a la excelencia que es la superior calidad o bondad que hace a alguien o a algo digno de singular aprecio y consideración. La Excelencia es la antigua areté griega que significa una aptitud excepcional para un fin.
Ser excelente es ser digno de la máxima valoración. Es destacar por encima de los demás. Es el superlativo de la calidad.
Queridos galardonados, con estos premios SECOT reconoce vuestros méritos y servicios con la máxima valoración que es capaz de otorgar. Vosotros recibís este galardón porque como decía nuestro Señor D. Quijote “no hay obra bien hecha que no alcance su premio”. Pero también SECOT recibe en este acto su premio, que yo quiero compartir con la Fundación Repsol. Nuestra recompensa es vuestro trabajo excelente y desprendido .Asi pues,acabo reiterando mis felicitaciones a los premiados y mi gratitud a la Fundación Repsol por hacer posible los galardones.